El cultivo a blastocito
Publicado el 13/09/2021
El cultivo a blastocito o cultivo largo de embriones consiste en mantener los embriones obtenidos tras la fecundación in vitro, durante más tiempo del habitual en unas incubadoras o estufas, favoreciendo que aquellos con mayor capacidad de desarrollo puedan seguir su evolución hasta el estado de blastocito.
A diferencia de la técnica convencional, en la que la transferencia de embriones se realiza a los 2-3 días desde la extracción de los óvulos, el cultivo a blastocito (5-6 días) permite mejorar la selección embrionaria antes de la transferencia, aumentando así las posibilidades de embarazo.
Se llama blastocito al embrión después de 5-6 días tras la fecundación, momento en que ha comenzado su proceso de diferenciación celular y puede observarse en él una masa celular interna que dará lugar a la formación del feto y una capa celular que será la placenta. Pero ¿Qué porcentaje de embriones que llegan a blastocisto?
Este estadio del desarrollo es aquel en el que el embrión llega al útero tras recorrer la trompa de Falopio y se considera, por tanto, el momento de mayor capacidad de implantación.
Para poder llevar a cabo una transferencia de blastocistos, los embriones obtenidos tras la fecundación in vitro se deben mantener dentro de un incubador durante al menos 5 días, con medios de cultivo específicos para esta etapa de su desarrollo.
Durante este tiempo, los embriólogos pueden evaluar mejor la calidad embrionaria al observar la capacidad de desarrollo de cada uno de los embriones y seleccionar así aquellos con mayor potencial de desarrollo, antes de transferirlos. El procedimiento de transferencia se lleva a cabo exactamente igual que en la técnica convencional.
¿Cuándo está indicado el cultivo largo de embriones?
El cultivo largo se aconseja en aquellos casos en los que se han realizado varias transferencias de embriones de buena calidad y todo parece haber ido bien, pero no se ha conseguido el embarazo, o en parejas que en día 3 tengan varios embriones de buena categoría.
También en aquellas parejas que no desean tener un embarazo múltiple, por razones médicas o familiares, puesto que la mejor selección permite transferir un único embrión pero con mayor posibilidad de éxito.
Es muy importante recalcar que el cultivo largo no mejora la calidad de los embriones, sino que permite una mejor selección embrionaria. Además, el cultivo largo hasta blastocito no siempre es la mejor opción, ya que si se tienen pocos embriones se corre el riesgo de que ninguno de ellos llegue a blastocito.
No obstante, las mejoras en los protocolos de calidad de los laboratorios permite que hoy en día esta sea una alternativa fiable al alcance de las parejas que desean ver cumplido su sueño de tener un hijo.
Consulta con tu especialista todos los detalles de esta técnica.